El presidente del Euzkadi Buru Batzar, Andoni Ortuzar, ha puesto toda la capacidad de acción política y de influencia de EAJ-PNV al servicio de las instituciones catalanas en la búsqueda de “una solución justa y democrática para Catalunya”. “Votar nunca puede ser un problema, el problema es no dejar votar”, ha afirmado el máximo dirigente de EAJ-PNV. En sintonía, el Lehendakari, Iñigo Urkullu, ha abogado por que el Estado español cambie el modelo de “unidad impuesta” y se abra a conciliar democráticamente las aspiraciones mayoritarias de las sociedades vasca y catalana. “Tenemos el derecho y la capacidad de decidir nuestro futuro. Apuesto por ejercer ese derecho de forma legal y pactada, con garantías. La solución es un referéndum legal y pactado, como Quebec y como Escocia”, ha asegurado Urkullu.

Ortuzar y Urkullu han protagonizado el acto central del Alderdi Eguna que EAJ-PNV ha celebrado en las campas de Foronda. Una fiesta a la que, un año más, han asistido miles de afiliados, afiliadas y simpatizantes. Un Alderdi Eguna en el que ha estado muy presente el histórico primer Alderdi Eguna, celebrado en San Miguel de Aralar el 25 de septiembre de 1977, del que se cumplirán 40 años. El presidente del EBB y el Lehendakari han tenido palabras de recuerdo y reconocimiento para las miles de personas que hicieron posible, con su masiva asistencia y su entusiasmo, que aquel Alderdi Eguna pasara a la historia como el día en que toda Euskadi vio la verdadera dimensión y fuerza del PNV. Un Partido al que muchos decían “viejo” pero que aquel día, “más joven que nunca, salió de las entrañas de la sociedad vasca para llevar a Euskadi al futuro. La foto de Aralar fue la foto de un pueblo en marcha”, ha asegurado Ortuzar.

Tras dar la bienvenida y las gracias a los miles de asistentes, el presidente del EBB ha querido iniciar su discurso expresando “nuestra solidaridad con las instituciones catalanas, con las personas que están sufriendo las detenciones y prohibiciones de estos últimos días. Lo que allí está pasando es una barbaridad democrática y una torpeza política, y lo queremos decir en voz alta y clara”, ha asegurado. “Catalunya, como Euskadi, es una nación que tiene derechos políticos. El pueblo catalán tiene que tener capacidad de decidir su futuro. Y las instituciones catalanas están legitimadas para llamar a su sociedad a las urnas. Vamos a defender esos principios en todos los foros e instituciones, aquí y sobre todo fuera de aquí”. En ese punto, Ortuzar ha puesto al PNV al servicio de la causa catalana. “Hemos estado siempre con Catalunya, en la Guerra Civil y en la dictadura; en el exilio y en la Transición; y de un modo especial desde el 31 de agosto de 2006, el día que el PP de Rajoy recurrió el Estatut ante el Tribunal Constitucional. Y seguiremos estando junto a Catalunya. Por eso, junto a la defensa de los intereses de Euskadi, buscar una solución para Catalunya va a ser prioritario para nosotros. Toda nuestra capacidad de acción política, toda nuestras posibilidades de influencia, de intermediación, las ponemos desde ya para lograr esa solución justa y democrática para Catalunya”, ha afirmado Ortuzar”.

Urkullu ha señalado a los poderes del Estado como responsables de la actual situación política de Catalunya y les ha instado a reflexionar sobre las consecuencias de sus últimas decisiones. “Hace siete años los poderes del Estado mutilaron el Estatut acordado entre las instituciones catalanas y las españolas, refrendado por el pueblo catalán. No midieron las consecuencias. Hoy pregunto al Gobierno español: ¿Ha valorado las consecuencias futuras de las decisiones judiciales, penales y policiales que está impulsando? Me temo que no. Esta es mi opinión: estas decisiones llevan a un escenario de escisión social y ruptura política e institucional que será muy difícil de revertir en mucho tiempo. No repitan el error de hace 7 años”. El Lehendakari ha pedido “un paso al diálogo que abra la puerta a una solución. No hay otra vía. He propuesto un diálogo con voluntad política real para conciliar, democráticamente, las aspiraciones mayoritarias de las sociedades española, catalana y vasca. La solución es un referéndum legal y pactado, como Quebec y como Escocia”.

Urkullu ha denunciado que, a día de hoy, el Estado español sigue sin reconocer su realidad plurinacional. “Me preocupa que se genere una situación sin retorno, irreversible. He mantenido una posición de prudencia y respeto con Cataluña. He defendido el diálogo y la negociación política. No ha habido respuesta y el conflicto ha desbordado todos los límites. Me preocupa la gestión de las emociones, la frustración. Me preocupa el riesgo de fractura social, el posible desapego de la política institucional. Realidad, realismo, reconocimiento, legitimidad, legalidad, respeto institucional, sociedad. Los conflictos requieren soluciones políticas. El punto de partida es reconocer la existencia de dos naciones que quieren decidir su futuro. En democracia. En libertad. Con garantías. ¿Dónde está el problema?”, se ha preguntado.

Pese a que el uso y abuso unilateral de las leyes ha destruido la bilateralidad durante años, el Lehendakari se muestra convencido de la vigencia y eficacia de la ‘vía vasca’ que él propone. “Este Pueblo es tenaz. Vamos a seguir defendiendo nuestra identidad y libertad. Vamos a seguir reivindicando la cultura del pacto y la bilateralidad. Con garantías. Nuestro camino es recto y el Estado está perdido en su laberinto. El modelo de Estado ha fracasado. Está roto. El ‘café para todos’ no les ha rentado. Ya lo dijimos”. Urkullu ha recordado que el pacto y la bilateralidad son las dos columnas de la ‘vía vasca’ que propugna. “Pacto y bilateralidad es respetar Euskadi, nuestros derechos históricos, lengua, cultura, educación, economía, servicios públicos y autogobierno. Esta es la ‘vía vasca’. Tenemos el derecho y la capacidad de decidir nuestro futuro. Apuesto por ejercer este derecho de forma legal y pactada. Con garantías. El modelo es Quebec. Mejor dicho Canadá, que acepta la ley de claridad. El modelo es Escocia. Mejor dicho Reino Unido, que acepta su realidad plurinacional, acepta que Escocia decida su futuro en democracia y libertad. La ‘vía vasca’ es cumplir el Estatuto; actualizar el Autogobierno; garantizar la bilateralidad; asumir la realidad plurinacional del Estado; arbitrar una vía de consulta legal y pactada; la libre adhesión”.

En esta idea ha incidido también Ortuzar. “La ‘vía vasca’ no es ni peor ni mejor que otras: la nuestra. Es la que creemos que necesita y merece Euskadi. Una Euskadi Nación europea. Una Euskadi dueña de su futuro, capaz de decidir en libertad lo que quiere ser y con quién y cómo quiere convivir. Una Euskadi que exige y necesita un profundo cambio en el modelo de Estado. Hemos depositado en el Parlamento Vasco nuestra propuesta. Estamos abiertos al diálogo con todos, sin exclusiones, sin vetos”.

El presidente del Euzkadi Buru Batzar ha querido también lanzar un mensaje al secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, y a Arnaldo Otegi, coordinador general de EH Bildu. Ortuzar ha denunciado que ambos estén utilizando la grave situación que vive Catalunya para “zumbar” al PNV. “Raya ya lo enfermizo esa fijación con atacar al PNV. Da igual lo que haya que mezclar, que manipular, que mentir. Ahora resulta que tenemos que romper con el PP. ¿Romper qué? Si nosotros con el PP y con el Gobierno de Madrid solo tuvimos un acuerdo presupuestario para este año. Un acuerdo, por cierto, que defendemos a capa y espada y que ha sido importantísimo para Euskadi y para la sociedad vasca”. Según Ortuzar, LAB y EH Bildu pretenden hacer antagónicas la ‘vía vasca’ y la ‘vía catalana’, pero ha advertido de que “no lo van a conseguir. En cada momento tomaremos la decisión que nos parezca mejor para Euskadi y para Catalunya. No nos vamos a dejar enredar por muchas piruetas dialécticas que den. Nosotros siempre de frente. De frente y a cara descubierta, toda la vida hemos ido así. Ellos no pueden decir lo mismo”. El presidente del EBB, finalmente, ha reprobado el cinismo de quienes “nos exigen iniciar un proceso unilateral soberanista y, al mismo tiempo, nos están preparando un otoño-invierno caliente. Van a utilizar lo sindical para hacer política. Antes tenían una dinámica político-militar, ahora es político-sindical. No vamos a permitir que nos desestabilicen el País. En esto tampoco nos van a encontrar de perfil. Nos van a tener de frente”.